HABLARE EN PARABOLAS
Hablaré en parábolas,
anunciaré cosas que estaban ocultas
desde la creación del mundo.
MATEO 13
24 Y les propuso otra parábola: "El Reino de los Cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; 25 pero mientras todos dormían vino su enemigo, sembró cizaña en medio del trigo y se fue.
Nosotros los hombres somos débiles e imperfectos, decimos cosas al azar porque no sabemos el daño que va a causar lo que decimos o enseñamos o lo que hacemos, a veces con buenas intenciones pero más las veces con malas intenciones, preferimos siempre lo que ambicionamos porque no somos capaces de renunciar a lo que queremos para favorecer a la comunidad, somos así, pero con la ayuda del Espíritu de Dios podemos convertirnos.
26 Cuando creció el trigo y aparecieron las espigas, también apareció la cizaña.
27 Los peones fueron a ver entonces al propietario y le dijeron: "Señor, ¿no habías sembrado buena semilla en tu campo? ¿Cómo es que ahora hay cizaña en él?".
28 Él les respondió: "Esto lo ha hecho algún enemigo". Los peones replicaron: "¿Quieres que vayamos a arrancarla?".
29 "No, les dijo el dueño, porque al arrancar la cizaña, corren el peligro de arrancar también el trigo.
Al decir cosas o hacer cosas al azar, sembramos cizañas, como los falsos profetas, que enseñan cosas que después no se cumplen, y la sabiduría de Dios no desea que las cizañas se arranquen cuando todavía no es tiempo, la cizaña debe conocerse por medio de la experiencia, es un arbusto que no da frutos, de la misma manera, un falso profeta provoca solamente desilusiones, no dan frutos. nosotros los hombres necesitamos conocer cual es la enseñanza que da buenos frutos y cuales no, de esta forma ya no tendremos dudas de quien es quien.
30 Dejen que crezcan juntos hasta la cosecha, y entonces diré a los cosechadores: Arranquen primero la cizaña y átenla en manojos para quemarla, y luego recojan el trigo en mi granero"".
Aunque la cizaña no da frutos por si misma, al quemarlas sirven para nutrir la tierra donde luego se cultivará el trigo, y el trigo crecerá con más vigor, el hombre es trigo y cizaña al mismo tiempo, juntos no servimos a nadie de alimento, en cambio el hombre limpio de la cizaña se convierte en pan. como decimos, "" es un pan de Dios ""
No hay comentarios.:
Publicar un comentario