sábado, octubre 10, 2009

PARA DIOS - LA SALVACIÓN YA ES HECHO

Pero, hay quienes todavía pretenden ser los salvadores, no entienden correctamente el hecho de la salvación, no es imponiendo nuevas doctrinas, ni eligiendo líderes a quien seguir.

El camino es sencillo, somos nosotros los que ponemos dificultades, nuestra vanidad, nuestra codicia, nuestros inútiles deseos etc.etc.

Esas dificultades que ponemos son muchas, en la siguiente lectura, Jesús nos abre los ojos y el entendimiento para los que quieren ver,



Lucas (9, 46-50)
Gloria a ti, Señor.

Un día, surgió entre los discípulos una discusión sobre quién era el más grande de ellos. Dándose cuenta Jesús de lo que estaban discutiendo, tomó a un niño, lo puso junto a sí y les dijo: “El que reciba a este niño en mi nombre, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, recibe también al que me ha enviado. En realidad el más pequeño entre todos ustedes, ése es el más grande”.

Pablo el apóstol dice al respecto: "cuanto más débil me siento, más fuerte soy" - un niño es pequeño, débil e inseguro, pero si camina en compañía de su padre, se siente seguro por que confía en que su padre lo cuidará de todo peligro, pero si confiamos en nuestras propias fuerzas, si nos creemos auto-suficiente como para cuidarnos solos, propio de nuestra naturaleza soberbia, y no solo eso, sino también como para ser guia de otros a los que consideramos más débiles, - es que estamos ciegos y un hoyo profundo hay en nuestro camino.


Entonces, Juan le dijo:
“Maestro, vimos a uno que estaba expulsando a los demonios en tu nombre; pero se lo prohibimos, porque no anda con nosotros”. Pero Jesús respondió: “No se lo prohíban, pues el que no está contra ustedes, está en favor de ustedes”.

La función de un servidor de Cristo, es expulsar demonios, es decir instruir para sacarle de su ignorancia y falsas creencias, falsos conceptos, falsas ilusiones, - a todos los seres humanos, no imponiendo sino exortando, no obligando sino pidiendo, no creyéndose más importante por el conocimiento recibido de Dios, hemos visto como Dios convirtió a Pablo que perseguía a los cristianos, sin embargo, Jesús le hizo uno de sus más ferviente discípulos, algo muy contradictorio para nuestro criterio, y Pablo reconoce este hecho, y reconoce también que el no es nada sino alguien que cumple un mandamiento del Señor, que no busca las alabanzas de los hombres, sino el ok. de Dios

Es muy elocuente que Jesús ponga como ejemplo la acción de servidores desconocidos, pasar desapercibido es una actitud que Dios lo tiene muy en cuenta, porque Dios es el que salva, por lo tanto, Dios y nuestro Señor Jesús deben ser los destinatarios de nuestras alabanzas.

De este modo es como nos incluimos en la salvación, tal como fue profetizado:

Zacarías (8, 1-8)

En aquellos días, me fue dirigida a mí, Zacarías, la palabra del Señor en estos términos: “Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Yo siento por Sión un amor ardiente y celoso, un amor celoso que me arrebata’.
Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Regresaré a Sión y en medio de Jerusalén habitaré. Jerusalén se llamará ciudad fiel, y el monte del Señor de los ejércitos, monte santo’.
Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘De nuevo se sentarán los ancianos y las ancianas en las plazas de Jerusalén, cada cual con su bastón en la mano, por su avanzada edad; las plazas de la ciudad se llenarán de niños y niñas que jugarán en ellas’.
Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Aunque esto les parezca imposible a los sobrevivientes de este pueblo, - ¿acaso va a ser imposible para mí?’.
Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Yo salvaré a mi pueblo de los países de oriente y occidente, y lo traeré aquí para que habite en Jerusalén. El será mi pueblo y yo seré su Dios,lleno de fidelidad y de justicia’ ”.
Palabra de Dios.

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