domingo, octubre 18, 2009

EL ESPEJO DE NUESTRA VIDA

La Palabra de Dios es como una espada afilada que penetra en nuestro ser hasta lo más hondo, así, descubrimos nuestro interior, y lo que encontramos, en la mayoría de los casos no nos gusta, nos vemos como en un espejo al despertarnos mal dormido, entonces tratamos de arreglar esa figura que vemos en el espejo.

La siguiente lección que nos brinda el único maestro, nos permite reflexionar sobre nuestras propias actitudes, es aplicable en todos los ordenes de nuestra vida aquí en este mundo, en lo social, en lo político, en lo laboral, en lo familiar, y con respecto a la voluntad de Dios.


Lucas (11, 42-46)
Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, Jesús dijo:
“¡Ay de ustedes, fariseos, porque pagan diezmos hasta de la hierbabuena, de la ruda y de todas las verduras, pero se olvidan de la justicia y del amor de Dios! Esto debían practicar sin descuidar aquello.

La vida que llevamos, no es solamente una cuestión de cumplir leyes, si es que la cumplimos totalmente. por aquello de; hecha la ley hecha la trampa, debemos tener en cuenta que la vida tiene sus altibajos, lo que hoy nos piden, tal ves mañana lo vamos a pedir nosotros, hoy por ti mañana por mi.

¡Ay de ustedes, fariseos, porque les gusta ocupar los lugares de honor en las sinagogas y que les hagan reverencias en las plazas! ¡Ay de ustedes, porque son como esos sepulcros que no se ven, sobre los cuales pasa la gente sin darse cuenta!”

Son palabras muy duras, algunos se sentirán ofendidos, pero, quien puede esconder sus acciones e intenciones ante Dios ? - nadie, y si nos habla con esta dureza, es para conmovernos hasta lo más hondo, ya que muchas vidas están en juego incluyendo la nuestra, todos estamos inter-relacionados, las cosas que hacemos pueden beneficiar o perjudicar a terceras personas y a uno mismo, Dice la palabra de Dios; Los errores de los padres lo sufren los hijos hasta la tercera o cuarta generación. las decisiones de un funcionario público, pueden beneficiar o perjudicar a muchísima gente. también las costumbres de la gente pueden tener consecuencias negativas para todo el pueblo,


Entonces tomó la palabra un doctor de la ley y le dijo: “Maestro, al hablar así, nos insultas también a nosotros”.
Entonces Jesús le respondió:
“¡Ay de ustedes también, doctores de la ley, porque abruman a la gente con cargas insoportables, pero ustedes no las tocan ni con la punta del dedo!”

Con esta verdad que nos dice el Hijo de Dios, podemos comprender que, un funcionario público con mucho poder, tiene más obligaciones que derechos, puesto que sus decisiones afectan a muchisimas personas, Jesús lo dice así; " Al que más se le da, más se le exigirá, si un juez que debe hacer cumplir la ley, y el no la cumple abusando de su cargo, tendrá doble condena, si un empresario abusa de sus obreros, tendrá doble castigo, lo mismo sucederá con todas aquellas personas que tienen mayor responsabilidad por su posición social.

Así lo hizo Jesús, siendo el Hijo de Dios, el de mayor posición social en toda la humanidad, se adjudicó la misión de servir, no la de ser servido, de más está decir, que todos los hombres de cualquier condición, debemos tener la misma actitud de Jesús.

La recompenza es muy grande, y nos está esperando con los brazos abiertos.

Palabra del Señor.

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