PARA QUE VIENDO NO VEAN Y OYENDO NO OIGAN, A LOS DE AFUERA SOLO EN PARÁBOLAS

Hay Personas que tienen interés en aprender y otras que no.

Hay personas con espíritu de contienda, - son las que todo lo discuten aunque sus palabras sean absurdas, - no razonan, no buscan alternativas, son cerradas de mentes.

Hay otras que son sencillas y con ganas de aprender, es el caso de Martha y María, las dos hermanas que recibieron a Jesús en su casa, Martha se preocupaba por tantas cosas que no tenia tiempo para nada, - en cambio María quedaba sentada a los pies de Jesús escuchando atentamente lo que decía, y seguramente preguntaba lo que no entendía.

La explicación es sencilla,
En el mundo hay grandes oradores, tienen facilidad de palabras, son políticos que quieren seducirte con palabras bonitas, también hay muchos predicadores que con sus ampulosas oraciones tratan de exaltar las emociones y cautivar la mente de los que escuchan, de este modo, no se enseña nada, absolutamente nada, con las emociones exaltadas no se puede razonar o discernir. y la seducción hace presa fácil de los oyente.

Jesús enseñaba en parábolas para evitar estas cosas, no quiere seducir a nadie, Jesús quiere que usemos la inteligencia para razonar y discernir, de manera que todos tengamos razonamientos propios y decisiones propias, no que otros nos digan en que o como debemos razonar, y que esos otros decidan lo que tenemos que hacer o no hacer, si tenemos interés de aprender las cosas de Dios, debemos despojarnos del criterio humano, - solo así podremos ser libres, tener libre albedrío.

Los que no quieren aprender, ni aunque vean resucitar a un muerto van a creer.