LA SERPIENTE EN EL MÁSTIL Y JESÚS EN LA CRUZ

Dios se manifestó al mundo a través del pueblo elegido, un pueblo que fue liberado de la esclavitud, no conocían a Dios sino por medio de sus grandes prodigios, la humanidad entera y ellos desconocían la Fe, pero ya la Fe estaba con ellos, por causa de la dures del caminar por el desierto, surgían en el pueblo grandes dudas acerca de Dios, y sus dudas le hacían caer en el pecado, no obstante y como una acción profética, Dios le ordenó a Moisés que levantara una serpiente de bronce en un mástil, y todos los que eran mordidos por las serpientes, con tan solo mirar la serpiente levantada en el mástil quedaban curados. este hecho es un mensaje para que nosotros en este tiempo podamos comprender un poco más del misterio de la Fe".- así fue como Moisés escribió acerca de Jesús.

Ahora en este tiempo, tenemos una inteligencia mucho más desarrollada que hace casi 6.000 años atrás, y conocemos la venida del hijo de Dios que fue crucificado para nuestra salvación, conocemos también su Evangelio aunque no todo, y por medio de la palabra de Dios y la obra de Jesús, podemos tener un conocimiento muy superior a los que cruzaron el desierto y miraron la serpiente de bronce, conocimos la crucifixión de Jesús y podemos mirar no ya una serpiente sino al hijo de Dios que fue levantado por todos nosotros, y no solo eso, también podemos conocer a Jesús resucitado que camina entre nosotros, no lo podemos ver pero lo podemos sentir dentro de nuestro propio ser, porque Dios es Espíritu,

Cabe una pregunta, ¿ que es la Fe" ? - nadie puede decir; yo tengo Fe" y no conocer ni poner en práctica el Evangelio, ya que por la predicación viene la Fe" - ¿ como decir que miramos a Cristo elevado en la cruz y desconocer sus enseñanzas, desconocer sus mandamientos ? . Decir que Jesús es nuestro Señor y no practicar sus enseñanzas ?, practicar el Evangelio es poner a Jesús en lo más alto de nuestro corazón. recién entonces será nuestro Señor..



Juan 3,13-17
Tiene que ser elevado el Hijo del hombre

En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo: "Nadie ha subido al cielo, sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna. Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen el él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él."
Palabra del Señor.