COMO PREDICAR EL EVANGELIO SEGÚN EL ESPÍRITU

Para predicar el Evangelio, primeramente debemos conocer lo que dice, - saber interpretar sus parábolas, también debemos conocer el pasado, es decir el antiguo testamento, porque así lo dice también el Evangelio.

Hay que tener en cuenta lo más elemental de las enseñanzas de Jesús:

1o, -Dichoso el que escucha mis palabras y las practica, - es elemental entonces escuchar la palabra de Jesús de su Evangelio para luego transmitirla adecuadamente, y es elemental practicarlas para obtener experiencia, y predicar con conocimiento de causa.

2o, Jesús dice: " Yo soy el camino, la verdad y la vida" - porque es el hijo de Dios, el que vino del Cielo. y también dice: "La verdad os hará libres" - y la verdad esta en el Evangelio y con ejemplos en toda la Biblia. por eso es necesario, tener en cuenta lo que está escrito en el antiguo testamento.

3o. La verdad consiste en conocer el bien y el mal, por lo tanto el que lleva la palabra de Dios, el Evangelio, para dar a conocer, debe hacer conocer el bien y el mal que está escrito, porque únicamente de este modo, podremos saber si que camino seguir, - si el camino del mal o el camino del bien, pero si el predicador, esconde parte de la verdad, esconde lo malo de la verdad, es decir, lo malo que hay en nosotros, comete un pecado de lesa humanidad.

4o. Jesús dice: "Amaras a Dios con todo tu corazón, con todas tus fuerzas y toda tu mente y amarás a tu prójimo como a ti mismo _ por lo tanto si el predicador esconde las verdades del Evangelio es porque no ama su prójimo y tampoco a Dios, porque no cumple su palabra

La gran mayoría de sacerdotes, pastores , ministros y laicos militantes en las religiones, por conveniencias propias, niegan que haya un castigo de Dios cuando ellos son merecedores de ese castigo, pero no cuando se trata de pedir "ofrendas"

al respecto:

Jesús dice:

25 «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que purificáis por fuera la copa y el plato,
mientras por dentro están llenos de rapiña e intemperancia!

26 ¡Fariseo ciego, purifica primero por dentro la copa, para que también por fuera quede pura!

27 «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, pues sois semejantes a sepulcros blanqueados,
que por fuera parecen bonitos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia!

28 Así también vosotros, por fuera aparecéis justos ante los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y de iniquidad.

29 «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, porque edificáis los sepulcros de los profetas y adornáis los monumentos de los justos,

30 y decís: "Si nosotros hubiéramos vivido en el tiempo de nuestros padres, no habríamos tenido parte con ellos en la sangre de los profetas!"

31 Con lo cual atestiguáis contra vosotros mismos que sois hijos de los que mataron a los profetas.

32 ¡Colmad también vosotros la medida de vuestros padres!

33 «¡Serpientes, raza de víboras! ¿Cómo vais a escapar a la condenación de la gehenna?

34 Por eso, he aquí que yo envío a vosotros profetas, sabios y escribas: a unos los mataréis y los crucificaréis, a otros los azotaréis en vuestras sinagogas y los perseguiréis de ciudad en ciudad,

35 para que caiga sobre vosotros toda la sangre inocente derramada sobre la tierra, desde la sangre del inocente Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, a quien matasteis entre el Santuario y el altar.

36 Yo os aseguro: todo esto recaerá sobre esta generación. ESTAS PALABRAS DE JESÚS ESCRITAS EN EL EVANGELIO, MUCHOS PREDICADORES LAS ESCONDEN PORQUE SABEN QUE SE REFIEREN A ELLOS. Y SON BASTANTES DURAS, Y NO POR ESO ESTÁ PREDICANDO A UN DIOS DEL TERROR -

PERO UN SERVIDOR FIEL NO LAS ESCONDERÁ AUNQUE LE CUESTE LA VIDA.

Jesús dice: Juan 16

7 Pero yo os digo la verdad:Os conviene que yo me vaya; porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito; pero si me voy, os lo enviaré:
8 y cuando él venga, convencerá al mundo en lo referente al pecado, en lo referente a la justicia y en lo referente al juicio;
9 en lo referente al pecado, porque no creen en mí;

Todos somos pecadores, y para salvarnos de nuestros pecados, debemos reconocerlos, creer en Jesús, escuchando su Evangelio y poniéndolo en práctica

10 en lo referente a la justicia porque me voy al Padre, y ya no me veréis;

La verdadera justicia es únicamente posible para Dios, porque Dios es el único que puede restituir los daños de nuestros pecados, Dios es el único que puede resucitar a los muertos, y no solo la muerte física.

11 en lo referente al juicio, porque el Príncipe de este mundo está juzgado.

El príncipe de este mundo somos los seres humanos, - cuando Jesús nos dio hasta la última gota de su sangre en la cruz, nos dio todo lo que necesitamos para salvarnos, del pecado y de la muerte, pero, si no escuchamos su palabra y no la ponemos en práctica, o no la hacemos conocer en plenitud, - ya fuimos enjuiciado, porque teniéndolo todo, lo rechazamos todo, por no creer.